jueves, 13 de septiembre de 2012
viernes, 31 de agosto de 2012
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viernes, 9 de enero de 2009
viernes, 21 de marzo de 2008
lunes, 17 de marzo de 2008
martes, 14 de agosto de 2007
San Rafael 2007
Estas son puras fotos del viaje a San Rafael de Febrero del 2007. Participaron esta vez Rodrigo Vega, Rodrigo Peralta, Lalo Valdivieso, Cristian Roth y unas amigas, la Maru, la Vane y la Pato, y en el Kintun (rafting) otros amigos nuevos y viejos
viernes, 22 de diciembre de 2006
La búsqueda de la Thunderace 1000 pal Ivan
Eran como las 9 de la noche y suena el teléfono: "¿comostamo..?" -"que paaasa Renatín" -"oye ¿vamo a Concepción el viernes?" - "aver, deja pensarlo..¡YA!"-"va el Claudio, el Marcelo, tú y el Ivan, vamo a buscar una yamaha YZF 1000"-"que gueena, yapo a que hora"- "ahí nos ponemos de acuerdo, yo cacho que como a las 9 de la mañana, y volvemos el sábado". Al final salimos como a las 12, pero tamo en Chile y somos chilenos...
Partimos primero a Santiasco pa pasar a buscar al Ivan que iba a esperar en Promoto. Antes de llegar ahí pasamos por la tienda donde se supone que vendían ropa de cuero pa moto a buen precio. Lo único que había era un mono de una pieza que le hubiera quedado chico hasta a Pedrosa... y eso fue después de dar como 10 vueltas pa encontrar la tienda, que estaba en la primera cuadra de Suecia. Bueno filo, nos fuimos a la tienda del flaco, ahí estaba el guatón, ma ansioso que la chachu. Yo andaba por las mismas, era mi primer viaje largo dentro de chilito en mi suzi. Asi que después de pasar al ñoba, salimos de vuelo rumbo a Concepcíon. Yo les iba indicando el camino pa salir de Santiago, aprovechando mi vasta experiencia; ahí aproveché de ir un rato adelante, porque sabía que llegando a la carretera iba a tener que ponérsela pa no perderlos de vista. El Claudio iba en su CBR 1100 XX con el Iván como pasajero (moto+piloto+pasajero=500 kg), el Renato en su CBR 900 aún con los colores negro/gris, Marcelito en su R 6 nunca corrida, nunca caída... y yo en mi guachi: Suzi GSXR 600 2004. Había calculado el kilometraje total ida y vuelta pa saber cuanta $$ tenía que llevar, contando bencina, comidas y alojamiento por una noche. No íbamos taaaaan rápido, asi que el viaje no fué tan estresante (algunos mientras más rápido van más calmados, pero a mí me da estress por los polis...), aunque un poco largo. El camino, que en su mayoría está concesionado, está impeque. Es casi todo rectas, solo hay que tener harto ojo cuando se cruza los pueblos. Al llegar a Chillán hay que tomar a la derecha y empezar a bajar la "Ruta del Itata" de casi 80 kilómetros hasta Concepción. A esta hora ya estaba anocheciendo, por lo que no pudimos probarla a concho, y dan ganas porque es espectacular: 2 y tres pistas por lado con rectas de más de un kilómetro y curvas amplias. Pero estaba de noche y caía un poco de llovizna. Después de un rato llegamos al peaje más caro que he pasado en moto $1.300!! Un poco más abajo llegamos al cruce que separa Talcahuano de Conce, pero hay que tomar "al aeropuerto" porque en ninguna parte dice "a concepción" ¿? LLegamos al Mall principal a juntarnos con el médico que tenía la Yamaha (le había vendido la XX al Claudio). Justo antes de llegar al Mall, en un semáforo me puse a conversar con uno de los pilotos del Rally Mobil que venía saliendo de un "superprime" en el centro. Seguía lloviznando y hacía bastante frío, suerte que yo andaba forrado con mi traje recién estrenado. El cuero salva caleta...
El Iván la revisó por todos lados y le dió una vuelta dentro del estacionamiento del Mall. Se hizo el trato, pero tuvimos que convencer al vendedor para que fuéramos de inmediato a su casa para pagarle y que la notaría la hicieran al día siguiente, sino Ivancito no iba a poder dormir. Este amigo no se fué nada de despacio a su casa, tuvimos que acelerar bastante en una ciudad desconocida para varios. Cuando fuimos a guardar las motos en su estacionamiento nos encontramos con una sorpresita: la nueva moto del médico este era la Yamaha R 1 más "enchulada" de Chile. Yo la conocía por fotos porque un día me escribió un mail su dueño anterior, felicitándome por tener una de las dos únicas gsxr 600 color amarillo que habían llegado el 2004, él la había visto en Promoto. Había visto toda la transformación de esta R 1 en www.bikepics.com (busquen a Máximo en Valdivia), desde que llegó de color plata a Promoto, hasta que se transformó en una belleza azul Yamaha, con escapes, powercommander, latiguillos metálicos y tornillería amarilla y roja. No creo que fuera a echar de menos la Thunderace. Después de hacer el pago, fuimos a buscar alojamiento, aprovechando unos datos que nos dió el mismo vendedor. Encontramos una residencial baratísima y con estacionamiento. Después de una duchita salimos a comer. Cruzamos el Bio Bio en dirección a Santa Juana, donde están algunos pubs y restaurants. Ahí comimos algo al lado de un ventanal que daba al río. ESPECTACULAR... y nadie llevó cámara.
Al otro día nos despertamos tempranísimo, porque había una carrera del Moto GP. Después nos fuimos a la notaría, al lado de la plaza. Ahí mientras esperábamos que se hiciera el papeleo, conocimos a otros motokeros amigos del doctor, re buena onda.
Rato después estábamos empezando la mejor parte del viaje: salir de Conce cada uno en SU moto, subiendo la Ruta del Itata y con sol!! Fueron los 80 kilómetros más cortos que he andado. En poco más de 15 minutos ya estábamos en la 5 Sur echando bencina, y el Claudio se quejaba de que su moto no daba más de 296 km/h uffff, yo a 240 no quería más guerra, el viento me pegaba demasiado fuerte en la visera del casco.
Partimos primero a Santiasco pa pasar a buscar al Ivan que iba a esperar en Promoto. Antes de llegar ahí pasamos por la tienda donde se supone que vendían ropa de cuero pa moto a buen precio. Lo único que había era un mono de una pieza que le hubiera quedado chico hasta a Pedrosa... y eso fue después de dar como 10 vueltas pa encontrar la tienda, que estaba en la primera cuadra de Suecia. Bueno filo, nos fuimos a la tienda del flaco, ahí estaba el guatón, ma ansioso que la chachu. Yo andaba por las mismas, era mi primer viaje largo dentro de chilito en mi suzi. Asi que después de pasar al ñoba, salimos de vuelo rumbo a Concepcíon. Yo les iba indicando el camino pa salir de Santiago, aprovechando mi vasta experiencia; ahí aproveché de ir un rato adelante, porque sabía que llegando a la carretera iba a tener que ponérsela pa no perderlos de vista. El Claudio iba en su CBR 1100 XX con el Iván como pasajero (moto+piloto+pasajero=500 kg), el Renato en su CBR 900 aún con los colores negro/gris, Marcelito en su R 6 nunca corrida, nunca caída... y yo en mi guachi: Suzi GSXR 600 2004. Había calculado el kilometraje total ida y vuelta pa saber cuanta $$ tenía que llevar, contando bencina, comidas y alojamiento por una noche. No íbamos taaaaan rápido, asi que el viaje no fué tan estresante (algunos mientras más rápido van más calmados, pero a mí me da estress por los polis...), aunque un poco largo. El camino, que en su mayoría está concesionado, está impeque. Es casi todo rectas, solo hay que tener harto ojo cuando se cruza los pueblos. Al llegar a Chillán hay que tomar a la derecha y empezar a bajar la "Ruta del Itata" de casi 80 kilómetros hasta Concepción. A esta hora ya estaba anocheciendo, por lo que no pudimos probarla a concho, y dan ganas porque es espectacular: 2 y tres pistas por lado con rectas de más de un kilómetro y curvas amplias. Pero estaba de noche y caía un poco de llovizna. Después de un rato llegamos al peaje más caro que he pasado en moto $1.300!! Un poco más abajo llegamos al cruce que separa Talcahuano de Conce, pero hay que tomar "al aeropuerto" porque en ninguna parte dice "a concepción" ¿? LLegamos al Mall principal a juntarnos con el médico que tenía la Yamaha (le había vendido la XX al Claudio). Justo antes de llegar al Mall, en un semáforo me puse a conversar con uno de los pilotos del Rally Mobil que venía saliendo de un "superprime" en el centro. Seguía lloviznando y hacía bastante frío, suerte que yo andaba forrado con mi traje recién estrenado. El cuero salva caleta...
El Iván la revisó por todos lados y le dió una vuelta dentro del estacionamiento del Mall. Se hizo el trato, pero tuvimos que convencer al vendedor para que fuéramos de inmediato a su casa para pagarle y que la notaría la hicieran al día siguiente, sino Ivancito no iba a poder dormir. Este amigo no se fué nada de despacio a su casa, tuvimos que acelerar bastante en una ciudad desconocida para varios. Cuando fuimos a guardar las motos en su estacionamiento nos encontramos con una sorpresita: la nueva moto del médico este era la Yamaha R 1 más "enchulada" de Chile. Yo la conocía por fotos porque un día me escribió un mail su dueño anterior, felicitándome por tener una de las dos únicas gsxr 600 color amarillo que habían llegado el 2004, él la había visto en Promoto. Había visto toda la transformación de esta R 1 en www.bikepics.com (busquen a Máximo en Valdivia), desde que llegó de color plata a Promoto, hasta que se transformó en una belleza azul Yamaha, con escapes, powercommander, latiguillos metálicos y tornillería amarilla y roja. No creo que fuera a echar de menos la Thunderace. Después de hacer el pago, fuimos a buscar alojamiento, aprovechando unos datos que nos dió el mismo vendedor. Encontramos una residencial baratísima y con estacionamiento. Después de una duchita salimos a comer. Cruzamos el Bio Bio en dirección a Santa Juana, donde están algunos pubs y restaurants. Ahí comimos algo al lado de un ventanal que daba al río. ESPECTACULAR... y nadie llevó cámara.
Al otro día nos despertamos tempranísimo, porque había una carrera del Moto GP. Después nos fuimos a la notaría, al lado de la plaza. Ahí mientras esperábamos que se hiciera el papeleo, conocimos a otros motokeros amigos del doctor, re buena onda.
Rato después estábamos empezando la mejor parte del viaje: salir de Conce cada uno en SU moto, subiendo la Ruta del Itata y con sol!! Fueron los 80 kilómetros más cortos que he andado. En poco más de 15 minutos ya estábamos en la 5 Sur echando bencina, y el Claudio se quejaba de que su moto no daba más de 296 km/h uffff, yo a 240 no quería más guerra, el viento me pegaba demasiado fuerte en la visera del casco.
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